Durante mas de tres años actualicé mi blog personal en el sitio terapad.com que ofrecía un servicio que aunque gratuito era aceptable y cómodo de manejar. No era nada del otro mundo pero ofrecía una alternativa decorosa a otros sitios de blogs muy populares. Lo cierto es que esta gente salió tramposa, cuando su red de usuarios creció, cambió sus políticas y comenzó a cobrar por su servicio, quien no pagase perdería todo lo que había documentado en su blog y así sucedió. No puedo decir que perdí todo mi material, pues lo tengo respaldado en un editor de texto, pero la inclusión de las imágenes que le daban vida al blog lleva un trabajo considerable. Para colmo Terapad no ofreció alguna posibilidad de bajar el blog para poder importarlo a otro servicio mas serio, lo cual dice mucho de la bajeza de sus actitudes.
La conclusión que debemos sacar es que al confiarnos de un servicio, ya sea gratuito o pago, debemos siempre mirar las grandes empresas y las mejor consideradas y respaldadas; quizas también nos puedan fallar pero el riesgo es menor.
